Residuo no orgánico: el alumno más aventajado
Ya sabemos que la basura sólo puede ser producto o resultado de la actividad humana y de que en función de lo que somos y de dónde vivimos, generamos un tipo u otro de residuo. Una de las clasificaciones más comunes de residuo que encontramos divide a éste en dos grandes tipos según su composición: orgánico y no orgánico.
Vamos a detenernos en el residuo no orgánico. Brevemente, se define como inorgánico todo desecho que NO tiene origen biológico, al contrario, es de índole industrial o derivado de algún otro proceso artificial, por ejemplo: plásticos, telas sintéticas, etc. Los residuos no orgánicos son, por definición, materiales que NO se descomponen de forma natural o tardan mucho tiempo en degradarse, como el plástico, el vidrio, el papel y los metales.